LA VIDA SIN PRISA. TIC-TAC. TIC-TAC...

La vida es un tic-tac que se puede llenar con una redonda, o con dos blancas, o con cuatro... Todo estará bien siempre que sea con algo que merezca la pena y ... sin prisa.

sábado, 29 de diciembre de 2012

Cartas americanas preliminares

Tengo la idea de escribir en el blog un conjunto de cartas que recojan mi experiencia en los días que esté haciendo el curso de movilidad con perro guía. Pero, creo que sería bueno poneros en antecedentes Manos a la obra. Fue a finales de Noviembre de 2011 cuando me decidí a solicitar de la ONCE un perro guía. Llevaba casi un año dando vueltas por mi cabeza la idea. Sopesaba pros y contras y no acababa de verlo claro. Por un lado, todos los usuarios de perro guía que conozco, tres o cuatro, están encantadísimos de tener este servicio. La verdad es que todos consideran que es mucho más de un servicio por lo que les aporta más allá de ser un asistente de Movilidad. Pero, que van a decir ellos, que lo tienen. Si no estuviesen contentos, no lo tendrían. También conozco algunos ciegos, con vida bastante activa e integrados social y laboralmente que no han optado por esta solución y que, no la echan en falta. Pero, que van a decir ellos, si lo creyeran conveniente para ellos, lo tendrían. Por lo tanto, tengo claro que no es imprescindible la utilización de este recurso. Personalmente, siempre he tenido ciertas "ganillas". Que me he aguantado por no estar dispuesto a asumir "la carga" que representa el tener perro en casa. Por otra parte, está la responsabilidad que supone hacerse cargo de un ser vivo y además un ser vivo que es como el Ferrari de los perros, por coste y prestaciones. El caso fue que en la estancia en el balneario de Fortuna (octubre de 2011), coincidimos con Tasio, un afiliado, jubilado de la venta del cupón y usuario de perro guía, quien con sus argumentos y sentimientos me ayudó a tomar la decisión. De acuerdo con Maribel (parte fundamental para la toma de decisiones), inicié los trámites, que no son pocos: entrevistas con psicólogo, trabajador social, médico y Técnico en rehabilitación, para que hiciesen los informes preceptivos, y a esperar que avanzase la lista de espera que, lo más probable, sería de tres o cuatro años. Vamos que el proyecto tardaría en ser realidad y con esta idea, me senté a esperar a la puerta. A finales de marzo del 2012, recibí la invitación para participar en una reunión informativa para futuros usuarios de perro guía. Asistimos y allí se nos vinieron a decir varias cosas de interés relacionadas con cuestiones legales y de procedimiento, al mismo tiempo que se nos ofrecieron testimonios de usuarios encantadísimos con su perrito/a. Esto me volvió a renovar los deseos, y a lamentar que la larga duración de la espera se confirmase De nuevo, me senté a esperar a la puerta. Pero, mira por dónde, a finales de octubre de 2012, recibo una llamada de la FOPG (Fundación ONCE del Perro Guía) en la que se me dice que, si estoy dispuesto a recibir el perro o y el curso de formación en USA., sería posible que fuese a lo largo del próximo año, 2013. Con lo que se adelantaría considerablemente la espera. - ¡Glup! Esto, sí…Mire, ¿Podría pensármelo un poco? … Lo de recibir el perro y el curso en los EEUU es una posibilidad a la que no opté cuando hice la solicitud, porque me parecía muy trabajoso, engorroso, dificultoso, lejanoso… Ocurre que la FOPG no “produce” tantos perros como usuarios solicitantes y tiene convenido el asunto con dos escuelas en los EEUU para la entrega de determinado número de perros al año. Ocurre que, como yo, hay muchos solicitantes que prefieren recibir el curso en España. Ocurre que había hueco para alguno que se pensase cambiar de opción y… - Oiga, mire, que sí, que estoy dispuesto y mi esposa también. Le dije esto porque ella, cuando le pedí tiempo para pensarlo, me dijo que claro, que entendía que debía consultarlo con mi esposa… . Más papeleo, incluyendo la grabación de un vídeo en el que debía demostrar mis habilidades de desplazamiento autónomo, y a esperar ser admitido. De nuevo me coloqué sentado a esperar a la puerta de mi casa, con la idea de que me avisarían con antelación, al menos mes y medio antes del curso. Esto era a finales de noviembre de 2012 y, el día 5 de diciembre de 2012, me llaman para adelantarme que, si estoy dispuesto, puedo ir a primeros de enero de 2013 a recibir el curso y el perro. - ¡Claro que síííí…! Se ha precipitado todo, se ha despeñado todo, se me ha empezado a cambiar la vida, lo presiento, otra vez más… ¡Qué vértigo! De nuevo a la puerta de mi casa, esperando, pero ahora con los billetes de avión en las manos y leyendo libros de perros. Información sobre los perros guía en: http://perrosguia.once.es/ Y también en la página del sitio de los EEUU dónde voy a estar del 9 al 31 de enero. http://www.leaderdog.org/espanol/programa-de-perros-guia.php